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viernes, 18 de abril de 2008

V Carrera de montaña -Cabeço - Busot (Alicante)

A la llegada a Busot, algo se mascaba en el ambiente. Los comentarios que precedian a esta carrera, pronosticaban una dura prueba que a mas de uno le iba a hacer rechinar los dientes, el nivel era altísimo y al ser este año campeonato autonómico, desató el olfato de tiburones lejanos en pos de una presa que echarse a la boca y que le sirviera de preparación para el inminente campeonato y copa de España.

A la recogida del dorsal en la plaza del ayuntamiento de Busot, ya se veian caras que intuian que todos ibamos a sufrir, hoy tocaba ponerse la cinta de kamikaze y lanzarse en plan Pearl Harbor a por una dura y bonita carrera.

Ya en la línea de salida me meto al control del dorsal con mi compañero Felipe, me despisto y no recuerdo que hay un tramo de apenas 20 metros de salida neutralizada, se me cuela to Cristo y cuando se da la salida real, llevaba delante a toda una marea humana. Tuve que emplearme a fondo para lograr alcanzar mi posición natural de la carrera, osea la mitad. Una vez conseguido esto, ya había gastado una vida, como en los videojuegos, ahora solo me quedaban dos, en el km.5 mi tobillo, ya resentido de otras carreras, me pega otro susto, veo las estrellas, menos mal que me lo he vendado hoy, pero siento que ya he gastado otra vida y ya tan solo resta una. Empieza la subida, zigzagueando, me voy encontrando cojonudo, y yo mismo me repito, que soy un fiera, y eso que venia de la K25, llegan las cuevas..., a mi personalmente que quereis que os diga, me corta el rollo total, es como el safety car de las carreras de montaña, haces tapón y toda la ventaja conseguida se neutraliza, no ves nada debido al cambio luz y encima sale un calor del fondo de las cuevas que sumado a la humedad hace que se te ponga el pelo como al del 11811, menos mal que a la salida las chicas del Red Bull, te alegran la vista y te dan un empujoncito hacia lo verdaderamente fuerte. La primera subida dura, ya se me hizo larga, intentaba pensar en otra cosa, pero la motricidad primaba y tenía que estar muy pendiente de subir, trepar, agarrarme y en definitiva subir.



En este punto enlazo con mi amiga Conchi Maestre, del Runnig Team, me comenta que lleve cuidado con la siguiente bajada, que ella ya la ha hecho entrenando y es de aupa, que mejor sera que baje con el culo pegado al suelo..., yo para mi pienso, ¡que exagerada!... pero.... Doouuuuuummmmm!!!, increible, mira que he corrido carreras pero esto no lo habia visto nunca, el tobogan Kamikaze de Aqualand era un simple bordillo comparado con esto..., un canchal de piedras de todos los tamaños que se convertia en una especie de cascada, de rocas y carne, con un ruido ensordecedor de piedras chascando unas contra otras y en el que una vez empezado el descenso era imposible parar, la inercia te arrastraba como si un agujero negro te tragase, si parabas un milisegundo una marea de piedras te engullía hacia sus entrañas... a todo esto piedras sueltas rebotadas iban pasando cual meteoritos interestelares al lado mio, venian desprendidos de los corredores que arriba iniciaban el descenso, bestial, divertido y peligroso muy peligroso, algunos nóveles antes de llegar creyeron por el ruido que se trataba de una cascada de agua real.


Uffff!!!, por fin termina el descenso, estoy sano aún no me he gastado la vida que me queda, apenas pensaba esto cuando enfilamos la terrorífica subida, que apenas se podía hacer andando, era curioso, ponias el pie de delante, se resbalaba y volvias a ponerlo, apenas andabas un metro y retrocedias otro,... bueno pues así imaginaros hasta 1000 metros con 500 de desnivel, cuando coroné el Cabeço, y vi el pilón del vértice geodésico respire para mis adentros, ...otra pantalla conseguida.


Ahora quedaba una interminable y técnica bajada hasta Busot de casi 9 kms, donde poder recuperar el aliento, en el último km. me tuerzo el tobillo otras dos veces, y me gasto la última vida pero ya diviso Busot, ya oigo al speaker, incluso me permito el lujo de sprintar en la ultima calle...y cruzo la meta...la llegada, una agradable sensación de gesta troyana recorría mis músculos,...me acuerdo de la peli de los 300,...cojones! llevo en el muslo derecho sangre, ni me he enterado...lo que hace la adrenalina...en una semana había participado en las 2 carreras mas duras del año K25-1700+ y Busot 19,4-1500+, creo que me he ganado al menos 2 botes de cerveza...y unas papicas...

jueves, 10 de abril de 2008

III Trail de la Calderona-Serra (K25)

Son las 6 de la mañana del 6 de abril, domingo. Una vez mas me embauco en un nuevo reto montañero, guevos!!, si aún no ha amanecido, y es que esto del cambio de hora hace apenas unos días me produce un cierto "Jet Lag", osea una mezcla de cansancio y otros síntomas que a esta hora de la mañana se me tornan a excusas calimerísticas.

En esta ocasión sólo Juanjo y yo, íbamos a defender los colores del club y de Villena por tierras valencianas, después de casí hora y media de coche llegamos a esta bella localidad metida de lleno en pleno Parque Natural de la Calderona. Nada mas recoger el dorsal me llevé la sorpresa de que mi número había sido reemplazado con mi nombre, y es que la organización había tenido la deferencia, con los que habían participado en las tres ediciones disputadas, de personalizar el dorsal con el nombre, sólo 18 participantes, locos mas bien, han corrido desde que en 2006 se creara esta pedazo de carrera, dura, técnica, y sobre todo bonita.



Este año el pistoletazo de salida fué el final de una traca, haciendo honor al lo valenciano de la prueba, 240 valientes salimos a partirnos el alma, por esos montes llenos de pinos, tomillo y romero. Tenía buenas sensaciones,... en el km 9 se pasa por el pueblo y recuerdo que el año pasado en este punto ya iba muerto, pero me encontraba entero, incluso llevaba apenas a un metro a "Mina", madrileña dura de pelar y que terminó subcampeona de chicas, y eso me dio alas para encarar los 16 siguiente kms, que me deparaban sorpresas, sudor y ...



Conforme avanzaba la prueba, mi reloj interno me marcaba que la gasolina no iba a llegar hasta el final, yo mascaba el trozo de barrita que había cogido en el anterior avituallamiento pero mas bien parecía un trozo de ternera de esos que hace "bola", pero me lo tragué porque le tenía que dar tiempo a mi organismo a que fabricará leña para el final de carrera. Subí, subí y subí, baje, baje y baje, una y otra vez, el lorenzo me golpeapa el cuello como mi profesor salesiano cuando me pillaba mascando chicle-"Chicle Bazoka, siempre en la boca"-decía y catapum, su mano se dejaba caer en mi cuello con la misma eficacia que intentas matar un mosca, osea, que golpeas con mas fuerza de la que se precisa para ejecutar al cansino díptero.

Bufffff!, por fin la última colina, vaya tela, me han adelantado al menos 4 subiendo este muro, menudo costarrón. Le voy a decir a mi amiga Pilar, que no me regale mas papas que luego pasa lo que pasa. Bueno, llega la última bajada, y veo un fotógrafo, me hago el chulico y pego un salto para salir tipo superhéroe en la instantánea, todo cojonudo hasta que toco suelo y mi tobillo izquierdo no abre el tren de aterrizaje, jooooooorrrrlllllll, ya estamos, menos mal que no ha sido mucho pero me hace cojear y blasfemar hasta el final de la bajada.


Por fín, llego veo el pueblo, estoy ahí, lo he conseguido, por tercer año le he ganado la batalla a la K25. Le hago otra muesca a mis Salomon y a la entrada a meta me recorre un yuyu indescriptible de felicidad, ¡¡he rebajado mi tiempo en casi 3 minutos!!, bien, bien, al fin y al cabo ya soy un año mas veterano, pero he cumplido, soy un finisher...