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sábado, 22 de noviembre de 2014

III-SUBIDA A LA PENYA MIGJORN XIXONA...vooolaaaare oh, oh, oh!!!

Tras debutar oficialmente tras cuatro meses de parón, con mucha bici de montaña y poca zapa de montaña, ahora tocaba algo mas serio que una subida de 5 kms. Me refiero a la nada desdeñable media maratón de montaña de Xixona, 21 kms, de puro pista americana, donde tiene que dar lo mejor de tí para que el barranco no te engulla, el aire no te arranque el dorsal en los collados o saltes tres vueltas de campana en la última bajad final digna de una final de descenso de las series DH Red Bull.

Me dirijo a Xixona en compañía de varios y varias villeneros mas. Mención especial para las chicas que cada vez mas se ponen metas mas altas y complicadas, y es que ya era hora de que el sexo femenino mostrara sus dientes a la vez que sus encantos disputando la dura montaña y muy bien que lo hacen ellas. Puntualmente recogemos el dorsal y tras el cortadico de rigor, vestirnos y calentar un poco, dudas con la ropa aunque al final y a pesar del aire mas que fresco el sol ha salido de pleno y mi experiencia me dice que a las primeras de cambios enchufará la madre naturaleza el suelo radiante para que nos sobre todo lo que te pongas ahora de mas. Así que de corto y a la salida.

Juana, Mª José, Mila y Magda, las guerreras villeneras!!!
Este año la salida se ha desplazado, para bien, unos trescientos metros con respecto a los años anteriores con el objetivo de salir del polideportivo y tener las duchas mas, "a mano". Así que por lo pronto 300 de ida + 300 de vuelta será mas de medio kms., añadido al trayecto, que en el resto no se había modificado, así que tras haber corrido ya los dos años anteriores, ya sabía lo que me iba a encontrar y esto me ayudo a dosificarme bastante.

Los primeros kms., compartidos con la chica que quedó 2ª clasificada.

Los primeros kms., para mi, no en esta, sino en todas, son los peores, el motor diesel cuesta de calentar y mas todavía cuando la ausencia de competiciones hacen que tires de 3 en 1 para que la chispa del motor tome carrerilla. Subida en rampa tras dar la salida y así prácticamente hasta llanear por la zona de entrada a Xixona, subida al castillo y enlazar con la senda que por una rambla ancha y bastante practicable nos llevará de nuevo a carretera asfaltada donde a derechas ya tomaremos una zona con patio a nuestra izquierda donde si observamos veremos pasar hayá abajo en la rambla mas complicada a los primeros clasificados. De momento, voy cogiendo ya por fin resuello y una marcha mas asequible para poder mantenerla, de momento los talones no me duelen y tengo ganas de correr. El aire en esta zona de pinos en la umbría es mas que fresco, y hacen brotar frioleras lágrimas de mis ojos, hay que parpadear como si hubieras visto a la mismísma Shakira en porreta si no quieres que se empañen y te pegues un buen trastazo.

Una de las zonas de barranco, muy, muy "divertidas"
Zona chula de correr, hasta que empieza de nuevo y poco a poco sendas con mucha piedra que se van estrechando, pero que si te empeñas se pueden subir a la marcheta sin parar de correr y eso hago. Calculo que llevo unos 80 o 90 corredores delante mía, de unos 300 así que no está nada mal, mañana hago 49 tacos y soy top 100 en un mundo, este el carreril, con cada vez mas competencia y gente mas entrenada y que se cuida como un profesional. Así que mi empeño primordialmente consistía en no perder el ritmo y limitarme a no darme un tropiezo pues a la semana siguiente tenía que acudir, si o si, a la K25 a la cual no falto en todas sus ediciones siendo uno de los 4 fullfinishers que han podido completar todas las carreras, así que, salud y buenos alimentos...cuando me quise dar cuenta ya estaba en la rambla de piedras redondas, mas y mas piedras, salto que te salto hasta llegar al avituallamiento.

Giro brusco desde el avituallamiento a la derecha y por canchales de pizarra rota, y entre ruidos sordos en aquella zona del Migjorn, iba ganando altura, ahora nos dirigíamos a una de las zonas mas bonitas visualmente de la carrera, una anfiteatro natural horadado en la caliza por donde nosotros como hormiguitas teníamos que recorrer, a nuestra derecha un patio con una buena caida pero que en ningún momento te supone el menor riesgo ya que hay espacio de sobra para desenvolverse. Como siempre los fotógrafos allí apostados dejaban constancia de nuestro buen hacer.

Zona del anfiteatro, muy bonita (a la espera de la foto de este año pongo la del año pasado)
Tras salir de aquí, viene, para mí, la parte clave de la carrera si quieres hacer buen tiempo. Es una zona de transición barranquil, un barranco que jugará contigo como un toro con el torero cuando lo caza, arriba, abajo, salto, derecha, izquierda y vas pasando por diversos microecosistemas que te van poniendo firme y a la vez minando las fuerzas, tus gemelos se pondran tan duros como las piedras que pisas y los cuadriceps casi los oiras gritar, pero no queda otra que salir del barranco o como Otzi el hombre de los hielos te quedarás allí tirado hasta que la en la próxima desglaciación te encuentren. 

Una vez fuera, no queda otra que correr, pero eso si te quedan fuerzas, y yo asombrosamente aunque a trote cochinero aún tiraba bien, sin parar, con ese correr cansino que va comiendo metros y la moral del que va delante que ve como te aproximas y lo adelantas, eso si, saludando claro!!! y así me planto en la ultima y mas dura súbida, aunque no es tan fiera como la pintan, simplemente se trata de echar manos a las rodillas e intentar que la barbilla pase lo mas cerca del suelo mientras se resopla el himno de la alegría y en un plis plas estarás dándole la vuelta obligada al vértice geodésico que nos espera ansioso para chocarnos la palma de la mano. Y allí está Emilio, bien abrigado, haciendo fotos.



Ahora toca una zona delicada pues la bajada se realiza por la ladera de la montaña donde hay tramos técnicos con piedra suelta donde es necesario extremar las precauciones y saber bien como y donde pisar para no rodar ladera abajo, aunque en esta parte un sol ya espléndido nos ayuda en el descenso. Cuando te quieres dar cuenta ya se ha llegado al collado y toda a izquierdas hacia abajo a tumba abierta, a pesar de no llevar mal ritmo de bajada, oigo por el canchal que vienen dos corredores a toda velocidad y hoy no es mi guerra, así que me aparto y los dejo pasar. La bajada va zigzagueando y hay que fijarse bien pues la senda está sembrada de pedruscos bien gordos los cuales hay que ir evitando entre saltos de puntillas, largo descenso que nos dejará en un tramo asfaltado, para posteriormente volver a pasar por las faldas del castillo para encauzar el ultimo km. justo por donde habíamos venido, aquí ya las fuerzas y los talones están que trinan pero gracias a un gel de Overstim's Red Tonic, logro conservar una velocidad de crucero bastante decente llegando a meta un minuto y medio mas pronto que el año pasado, así que teniendo en cuenta que era algo mas larga y mi etapa de convalecencia no ha estado nada mal.



En meta saludos a Raúl y José Antonio mis compañeros de coche que hacía unos minutos que habían llegado, cerveza y un bocata de jamón, saludos, y mas saludos, y vemos entrar a gente sin parar, como echaba de menos estos raticos, cuanta buena gente para compartir afición, las machacapiedras, Natalia, Ana y Clara tras la ducha comentando la carrera, mis chicas villeneras felices y contentas de haberle otra muesca a sus zapas montañeras y que valientes!!!, Davinia y Bea, que tan bien me trataron en mi ultima ultra de Gredos y así sin parar de contar para terminar de cerrar una mañana brillante en todos los sentidos.

Con la chicas villeneras!!!



Davi a mi derecha y Bea a mi izquierda, grandes!!!
Con las divertidísimas chicas Machacapiedras, Clara, Natalía y la campeona Ana Abad.
Tras esta prueba test, me quedo contento y sobre todo esperanzado para la próxima carrera, la K25 que será el próximo domingo 23 y donde tendré que ir, y es verdad, a defender título, no de podium pero si de fullfinisher, pero eso ya será otra historia...

viernes, 14 de noviembre de 2014

VIII-SUBIDA A LA CRUZ DE LA MUELA...el retorno!!!

De todos es sabida la archiconocida frase de "No hay mal que 100 años dure", y yo en mis propias carnes me empeñé en demostrarlo, así que tras mi nosequetropecientosmil tratamiento para curarme el dolor de talones, y reconozco, que con una gran mejoría que no con la solución definitiva, me encamina tras cuatro meses, a competir, mas que nada por ver si me acordaría de como se ponía un dorsal en el pecho, a pesar del simple mecanismo de los imperdibles que se encargan de sujetarlo.
 
Me puse a buscar en el dilatado calendario de carreras por montaña, que ahora es mas complicado de elegir, que una miss en un desfile y pude encontrar una prueba, ya conocida por mí, y lo que mas me gustaba era que, sobre todo, no tenía apenas kms., y la mitad en subida. Estoy hablando de la Subida a la Cruz de La Muela, donde participé ininterrumpidamente desde su inicio en 2007 hasta el 2010 y descansando hasta este 2014 donde, como digo, quise volver a probar suerte y a ver si de alguna manera conseguía repetir esos 31 minutos y poco en subir a la cruz metálica que corona la meta y la cima.

Domingo 9 de noviembre, Orihuela, hace una muy buena mañana para correr, algo nublado pero con la temperatura ideal para correra de corto todavía, y esque esta zona es un edén, sobre todo en invierno, eso si no vengas en verano a correra por aquí o crevillente o a fé mía que te convertirás en capellán chamuscado para combinar con unos trozos de tomate y una buena chorradita de aceite de oliva.


Puntualmente se dá la salida, somos 200 corredores, este año ya soy Veterano B, y yo ni mas iluso creyéndome con opciones, si así, a la primera recién salido del huevo, nada mas lejano de la realidad, todos los "abueletes" andan pero que muy finos, y yo no estoy precisamente en mi mejor momento así que una vez dan la salida y viendo el percal (casi todos corriendo hasta las primeras cuestas a menos de 3:30 km/h), me dije, Miguel, a disfrutar y a subir y subir. Así que no quedó otra, que resoplar, y andar en los tramos mas empinados, hasta llegar a meta con el corazón apenas resguardado por las amígdalas con tal de no salir disparado al fabuloso mediterráneo que se contemplaba desde la cima en una mañana radiante.





Poco mas que contar, ahora la bajada es sin cronómetro, así que me dedico a bajar divirtiéndome y comprobando que los talones, hoy al menos se están portando. Una vez en la zona de meta, 32 minutos, solo un minuto mas que hace 4 años y compruebo que me he quedado el 78 de la general, pero el 10 de los abuelos de 20 en Veteranos B- (1960-1969) yo soy del 1965 así que por la mitad y recién salido de la lesión pienso que no está tan mal, tampoco el 78 de la general con tanta liebre que salió al principio y tras la ducha el bocata y la cerveza correspondiente me vine para Villena, pensando en la siguiente carrera, la media maratón de Xixona,...pero eso ya será otra historia...

FOTOS CLUB TRAGAMILLAS ALBUM I 
FOTOS CLUB TRAGAMILLAS ALBUM II