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miércoles, 5 de octubre de 2016

SUBIDA A LA CASICA DEL GUARDIA 2016..., ya ni casica, ni guardia!!!

Una verdadera pena que una carrera plenamente instaurada en el calendario y que uno de los lugares de paso, la famosa Casica del Guardia, o del Médico anteriormente, se haya truncado en su recorrido por motivos "burocrátcos" vamos a decir. Ahora ya no tiene mucho sentido llamar a esta carrera la de la Casica del Guardia porque ya no nos dejan pasar por ella. De repente ha salido un ama de la casa y unos cazadores dispuestos a ser los guardianes de la galaxia. No quiero entrar en mas polémica pero no hubiera pasada nada si todo hubiese seguido como hasta ahora sin necesidad de poner puertas al monte.

Calentamiento prvevio a la carrera junto a mi mujer.
 Bueno pues entrando en materia, comentar que tras venir con el rabo entre las piernas del pedazo de carrera de Vilaller la pasada semana, tocaba consolarse con esta carrera que ya contaba con su 8ª edición. Pero era correr en casa y había que dejar buena impresión aunque las piernas todavía acusaran el tremendo esfuerzo del domingo anterior. Este año durante la recogido del dorsal se podía dejar un algún producto no perecedero para contribuir socialmente.

Recogiendo el dorsal y entregando nuestro "kilo solidario"
En esta ocasión me acompañaba nuevamente mi mujer, pero esta vez como corredora, y no veas lo fiera que es, lleva ya unos años entrenando y la verdad que ha demostrado con creces que tiene todo lo que tiene que tener para ser mas que respetada en el trailrunning, coraje, decisión y una gran capacidad de sufrimiento y empeño. Tras la llegada y recogida del dorsal, muchos saludos, ha vuelto a venir Gustabo Buades de Alicante que ya se encuentra como en casa, Manolako tambien está con él, Angelín corriendo con su cámara "on board", todos preparados.  Vueltas de calentamiento previo, aunque el día prometía una vez mas ser de lo mas caluroso. Excelente ambiente de corredores y es que ésta carrera se convierte de hecho en una fija ya en el calendario para muchos y a las pruebas me remito cuando mas de la mitad de los corredores son foráneos.
Juana, Gustabo, Vicente, Angelín, no nos queríamos perder el evento.
Saludando a mis buenos amigos de Calpe con familia Villenera que no quisieron faltar.
 En un muy buen ambiente y como si de una carrera de amigos se tratara se dá la salida, cuesta abajo para salir de las instalaciones del Polidportivo de Villena, para doblar enseguida a izquierdas y enlazar con la pista de la llamada "via verde del Chicharra", aquí ya vamos todos despendolaos!!! demasiada velocidad a la que intento aferrarme pero no es mi ritmo y mis piernas me recuerda mi semana pirenáica, así que una vez que a la altura de unos áridos doblamos de nuevo a izquierdas para buscar las primeras sendas de subida ya tenía un buen pelotón adelantado.

Angelín con su cámara y su nº 32 siempre tan solidario, yo en segundo plano.
Cuando apenas llevamos un km y medio toca una vez mas doblar a izquierda y ahora ya si empezar a subir por un barranco, el llamado "Barranco Tuerto" y creo que un acierto para la carrera al "caparse" la zona de la Casica, en esta parte del recorrido se pone ese puntico de destreza para ir por un estrecho cauce seco saltando entre piedras y matojos pero que no deja de ser un nuevo escalón de esfuerzo para la prueba. Aquí imposible adelantar así que ya sabía que hasta la cima al collado no quedaba otra que mantener un buen ritmo y guardarme para el cresterio y el siguiente descenso. Durante la subida por el barranco, los comentarios sobre el calor que iba a hacer eran unánimes y las gotas de sudor resbalan de nuestra frente a la nariz como si de un tobogan de un parque acuático se tratase, manos a las rodillas sudorosas y poco a poco comer metros y desnivel. Sus 19 kms. y 700+ la hacen algo engañosa a a esta carrera que pondrá en su sitio a mas de uno si no te sabes escalonar en el esfuerzo.

Subida casi haciendo el trenecito en el barranco Tuerto.
Mi mala salida me hizo ir al comienzo en una zona algo atrasada.
Y mi mujer que todavía tenía mucho que decir!!!
 Llego arriba, hay un avituallamiento pero ni paro, al menos de momento, he perdido mucho tiempo en la subida al perder puestos en el llano y tengo que recuperar. Justo en esta parte estoy mas que familiarizado, de hecho entreno todas las semanas por aquí y se lo que viene y sobre todo donde pisar, además este tramo lo había marcado yo el día de antes con Gerson como ayuda a la organización de la carrera y sabía que estaba mejor que mejor de marcaje. Me tiro como alma que lleva el diablo y empiezo a sonreir y a recuperar posiciones, llega la bajada y me lanzo hacia el embalse triangular como yo le llamo y pillo la pista asfaltada, aunque hecha polvo que nos lleva a la zona del depósito de agua.

Panorámica de la primera bajada hacia el embalse.
Llego al final de la bajada y pillo ya el asfalto.
Mi mujer bien posicionada pisándome los talones.
La subida por este tramo es larga y debes de dosificarte porque tiene varios toboganes que te dejan las piernas tocadicas para luego volver a tocar la montaña, así que como también lo he entrenado intento llevar un ritmo constante y digno pero se de sobra que no es el correcto, demasiado lento, pero no puedo apretar mas, queda carrera y sigue pululando en mis cuadriceps la subida a la cima de 2.500 metros cerca del Pico de Vallbierna. Así que sin pena ni gloria llego al desvío a derechas tras pasar el depósito de agua donde estaba perfectamente apostado Fermín de Trazo y otra chica fotógrafa para dejar constancia que a pesar del esfuerzo no había dejado la sonrisa en la cuneta.

Llegada a la curva del depósito de agua para incendios.
Bajando a toda pastilla hacía el collado de la MIna de Los Colores.
Mi mujer como buena bajadora pasándoselo en grande.
En este punto se gira brúscamente hacia la derecha para descender por una senda rápida y algo técnica a la zona de confluencia de varias sendas mas, conocida como el collado de la Mina de Los Colores,  por la gran cantidad de minerales de sal hierro de sus alrededores y con uso ininterrumpdio desde el neolítico hasta el siglo XVIII. Desde aquí las carrera nos hace descender por una senda que conozco de sobras y que calificaría de técnica ya que no puedes bajar la atención debido a la diversidad de terreno que te vas encontrando, raices, piedras, desniveles y peraltes que hará que lo pases en grande si lo que te gusta es bajar rápido. Hasta la zona de Las Cruces donde tendremos u nuevo avituallamiento al que sigo sin pararme para intenter "maquillar" el resultado de mi penosa salida.

En el collado hacía abajo a la zona del paraje de Las Cruces
Ahí estaba José Antonio Azorín para hacerme la foto.
Llegando al final de la bajada, zona técnica con piedras y raices.
Y mi mujer en mi busca y captura!!!
Hasta aquí todo bien, bastante bien diría yo pero de nuevo y apenas sin descanso y por la senda que pasa por el cima del túnel de la autovía buscar la senda paralela justo a la que hemos bajado para que de nuevo nos vuelva a llevar a la cima del collado de La Mina de Los Colores nuevamente pero en este ocasión para una vez arriba coger la senda que deriva en un largo y tortuoso barranco pero precioso y largo donde nuevamente se vuelven a poner a prueba los reflejos, saltando entre rocas, calderones, y bancales rotos hasta llegar a la parte trasera de la sierra. Justo en este punto fué donde casi al final pegue la petada final, hasta aquí llego mi gasolina y pago muy caro el esfuerzo pierenáico ya que apenas podía correr por zonas donde en mis entrenos siempre hago corriendo.

Arfff, arfff, otra vez aquí donde hace poco acabaos de pasar para bajar.
Mi mujer como una campeona defendiendo la posición, una jabata!!!

 No quedaba mas que encogerse de hombros y tirar con el corazón mas que con las piernas, todavía quedaba llegar al final de la rambla donde estaba el último avituallamiento, que con el calor que hacía, aquí si que paré ya a beber agua fresca, saludando a los presentes. Yo no paraba de pensar que con estos ritmos, es fácil que hasta mi mujer me pillase en esta zona y no veas el cachondeito que se iba a montar con los colegas. Así que ya por amor propio hizo al trote hasta meta la parte mas fácil de la carrera, que son esos ultimos kms. de pista que te dejan en el Polideportivo Municipal.

Agotadico llego al último avituallamiento, ahora ya todo llano hasta la meta.
  Quedando medio km., aproximadamente me alcanza Tito, un buen amigo que empezó a correr montaña por acompañar a Mila, su mujer, y que en muy poco tiempo se ha puesto muy fuerte, muy educadamente no me quiso adelantar y se limitó a acompañarme hasta la meta donde entramos juntos mostrando el gran valor humano que posee y demuestra siempre. Gracias Tito. Por mi parte no he podido pillar trofeo de mi categoría de Master, han venido gente muy fuerte y de lejos y estaba muy caro el podium.

El avituallamiento final como siempre espectacular, el presidente del club en la plancha sin parar de hacer perritos calientes, frutos secos, empanadas de todas clases, bocatas, y un sinfín de viandas de las que todos dimos buena cuenta, sobre todo de la cerveza que era demandada por doquier. Al poco de llegar yo, apenas en 8 minutos llega mi mujer y de que manera, se alza con el segundo puesto de su categoría, tercera local y segunda de su club y es que es una fiera en potencia.

Hasta tres trofeos recibio mi mujer y es que cuando se pone, se pone.
Tras la entrega de trofeos y el espectacular aperitivo a la ducha y para casa, ya podíamos decir que una vez mas la carrera de la mal llamada ahora "Subida a la Casica del Guardia" has sido otro notable éxito. Ya toca descansar u poco que en apenas tres semanas vuelvo a Pirineos a correr por etapas si mis rodillas me lo permiten, pero eso ya será otra historia.

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