I Carrera de montaña Elda (Bolón-Camara)

El pasado 10 de Febrero, me desplace a Elda junto con mis compañeros de club a disputar la primera carrera oficial de 2008. Se trataba de estrenar, la liga y estrenar las nuevas equipaciones, este año estamos patrocinados por DOCE, que es un gimnasio-escuela, como así mismo le gusta llamarse y que de alguna manera valora nuestro trabajo en las carrera de montaña a nivel de ciudad. Menos mal que una chica simpática nos hizo la foto oficial porque uno por otro nadie nos llevamos la camara digital,... gracias Patri.

El domingo se levanto muy, muy fresco, mientras recogíamos el dorsal, saludábamos a unos y a otros, un hola por aquí, un que tal, por allá,... una de las cosas mas bonitas y humanas de las carreras, de hecho en la mayoría de ellas sólo ves a determinado tipo de gente, con ropa de faena, oliendo a Reflex, con las mallas Nike, la gorra Salomón, la sudadera de Quechua y la sonrisa de oreja a oreja, seguro que si los veo de paisano, nos los conozco, al igual que me ocurre con la gente de uniforme,.. el butanero, el cartero, el gasolinero, etc. Bueno, la carrera en sí, fue bestial, muy dura, aunque tengo que reconocer que después de lo que llevo ya en las piernas cuando vi la subida al Camara, solamente me reí para mis higadillos diciéndome, ya estamos, que esperas, esto es una carrera de montaña cojones, o acaso creías que "El Corte Inglés", te iba a patrocinar la carrera poniéndote una cintita hasta la cumbre.

Apretando los dientes en plena subida, tirando de pelotón.

A mi personalmente me gusto mucho, fué una carrera seria, técnica, dura, bonita y sobre todo donde se podía correr, no había excusas de que si a la salida te habían hecho tapón y bla, bla, bla. Quede muy satisfecho, incluso creo que las pocas series que estoy haciendo, se vieron reflejadas en esos tramos cansinos de pista que ahora casi me vinieron muy pero que muy bien.


Al final, un tiempo mas que digno, teniendo en cuenta el perfil de la carrera y los 1.120 metros de desnivel positivo, 2:37 están discretos, siempre queda el consuelo de que entras a meta el ciento y pico, pero otros 200 valientes y que han sufrido lo mismo que yo han entrado también con el orgullo por la nubes, tras cruzar el arco de meta. Esto es lo mejor, el deber cumplido, no importa el puesto demasiado cuando eres del montón lo que importa es estar ahí, pelear las dos horas y pico de la carrera y llegar sano y salvo, con los deberes hechos. Incluso, los lesionados, por torceduras, roturas fibrilares o caidas, tienen el mérito de haber estado al pié del cañón, yo he estado en sus carnes y la verdad, se queda una rara sensación a haber fallado, pero que es totalmente equivocada, pues para lesionarse hay que participar y eso es y sera siempre lo mas importante.

Como colofón ha todo esto, el burrucho de Paco Lázaro, confirmó una vez mas su grandioso estado de forma entrando a meta el 3º de veteranos, con un tiempazo de 2:04, una verdadera maquina...