II PUJADA PENYA MIGJORN XIXONA...piedra, sudor y frío!!!

Un año ha pasado como una exhalación y de nuevo junto a mi grupo de villeneros me vuelvo a reencontrar con la Penya Migjorn, ahí erigida tan majestuosa y dulce, porque no, en el valle de Xixona, que tan bien siempre nos acoge. Es la II edición de esta divertida y técnica carrera y no pensaba perdérmela por nada en el mundo. Allí me iba a encontrar e Vicky y Carlos, entre los organizadores de la prueba y unos de los artífices de su propagación. La inscripciones fueron un exito y el boca a boca ha hecho su papel a la perfección, lleno hasta la bandera, pasen, pasen y vean señores.

Con medio cuerpo metido en el coche que hacía un frío de miedo.

Comentando la carrera con los compañeros villeneros.

Hace frío, apenas 2ºC, y mis dedos en la umbría epenas aciertan a pasar la brida del chip a las Salomon, estamos deseando acercarnos al sol que apenas a 15 minutos de la salida nos deleita y comienza a caldear un escenario tipico de viedeojuego, y es que el trazao de esta media maratón con sus casi 21 kms. y 1.085+ serían ideales para una Xbox o una Play Station en forma de juego que todo trailrunner desearia tener mientras se recupera de una lesión y así quitarse la espinita de no poder correr.

9 villenros y algunos mas que nos encontramos en la zona de salida.

Bajo la pancarta muchas felicitaciones, si amigos, si, hoy cumplo 48 años para lo bueno y lo malo y a pesar de los dolores que me persiguen en casi todas las carreras (ya no recuerdo una carrera a la que haya acudido impoluto), allí bajo el arco de salida estaba yo para devorar de nuevo esos kms., tan bonitos y variados que nos depara Xixona. Como siempre salida rápida y subiendo para ponernos a cada uno en su sitio y en las primeras rampas cuento delante mió aproximadamente unos 120, y es que para esto tengo un ojo espectacular. Enseguida, y gracias a Dios, parón, y el que diga lo contrario miente, que nos viene a todos de lujo para recuperar la respiración tras 1 km, en subida a toda pastilla, hasta que poco a poco tomamos el castillo mientras pasamos por delante de una colla de dolçainers que nos deleitan y hacen mas llevadero el esfuerzo. Saludo a Vicky, y justo bajada un tramo y enseguida comenza la senda que rodea el cabezo, y que poco a poco nos meterá en vereda nunca mejor dicho.

De cámino al Riuet, el caso es que el ritmo de carrera fué rapido siempre.

Saliendo del cauce antes de llegar a la zona de asfalto.

Tras esta rodeo al montecillo, nos bajan al "Riuet" que el año pasado y tras las pasadas lluvias estaba con algo de agua y debíamos ir saltando para no meter la zapa en un gran charco, ahora era distinto, estaba seco aunque húmedo por la noche anterior y la velocidad en este punto era mantenida, ya me encontraba mejor de pulsaciones y voy incrementando el ritmo, va picando en subida hasta acabar en una zona de asfalto que durante unos kms., muy cansinos para mí, por los ritmos en asfalto, nos metía en una subida entre pinos, muy empedrada y empinada donde varios ciclistas de montaña nos mirán perplejos por lo escarpado del terreno, y por donde ellos iban "bajando!!!" así que el asombro y el respeto era mútuo, tras unos tramos de pista el primer avituallamiento nos recibía con las manos abiertas. Tras él una preciosa bajada por losa de piedras donde si mirabas abajo veías a los corredores mas adelantados que habían llegado al fondo del cañon. Asi entre pinos finalmente desembocamos en el cauce de una rambla con muchos pedruscos y zonas de saltos algo comprometidos hasta llegar al segundo avituallamiento. Esta zona me gusta mucho porque es cuando sale a relucir la experiencia de años y poner en práctica los apoyos para avanzar. 

Llegando al primer avituallamiento, gracias!!!, pero no paro.

Tras el avituallamiento, desvío a derecha y subida empinada por losas de piedra sueltas desprendidas de la montaña; nos acercábamos al llamado anfiteatro y zona mas peculiar de la carrera, una caprichosa hoz formaza por la fuerza eólica y la erosión habían convertido esta zona de apenas 300 metros en un paraiso para los sentidos y que díficilmente olvidaran las retinas a pesar de la concentracion en la respiración y en no darte un batacazo o peligras si caes al patio de tu derecha de algo mas de 30 metros, peligrosamente precioso!!!

La zona mas bonita de la carrera, el Anfiteatro, sin duda para recordar.

Tras salir de aquí, siguiente pantalla del videojuego!!!, la rambla madre, la rambla larga, dura y técnica con contínuos toboganas, trepadas, y cambios de zona, sales, entras, pero siempre por la rambla durante unos buenos kms, que terminan por poner tus piernas a fuego y donde vas pensando que dentro de poco vendra la subida mas dura de la carrera, pero todo llega y tras divertidas triquiñuelas para salir airoso de este lance las marcas nos desvían a la izquierda para en una corta pero dura subida entre matojos, romeros y espinos, llegar al collado jadeados por varios espectadores que nos animan. El sol en este punto ya está bien alto y se agradece tras salir de tanta umbría aunque vamos ya todos bien calentitos.

Las vistas entre senda y senda, espectaculares, al fondo Aitana nevada.

La zona de acceso a la subida mas fuerte es engañosa, pues son casi tres kms. de sendero que en ocasionas pica hacia arriba y tienes que saber economizar las fuerzas para llegar con garantías a la base de la ultima subida donde irremediablemente te pones la mayoría del trayecto apoyado manos en rodilla y para arriba, yo por suerte me he tomado un gel de Overstim's Red Tonic, y llego con mucha fuerza a esta zona, así que no me importa hacer un rato andando y otro corriendo para llega justo al vértice geodésico fresco como una lechuga. Aquí vuelta hacía abajo para bordear la zona este y pasar por tramos algo complicados, donde la inclinación y piedra suelta te obliga a echar culo a tierra a veces queriendo y otras sin querer, menos mal que pasa rápido y enseguida tomamos entre pinos una senda preciosa de bajada larga, técnica y rápida de las que a mí me gusta. Lástima que ha hace años que no bajo como bajaba porque el espolón se me clava en el talón y no tengo mas remedio que aminorar la marcha. Esto unido a la contractura del cuadriceps, que tan sabiamente contiene el kinesiotape, hace que baje a toda pastilla pero con máxima precaución, primero de no caerme y segundo de no cargar las zonas lesionadas.

Por fín, se acabó la rambla, que dura y bonita a la vez!!!

Bajando y disfrutando del paisaje, al fondo la peña que da nombre a la carrera.

Como siempre allí bajo y antes del asfalto está el buen fotógrafo, para retratar al fondo de nosotros la curiosa forma de la Penya Migjorn, y dejando para el futuro unas bellas imágenes de absolutamente todos los corredores. Aquí todavía me queda energía, y puedo ir de menos mas, oigo los dolçainer de nuevo indicándome la proximidad del Castillo y de la meta, senda de bajada, asfalto rápido y las rampas que antes nos costaba tanto subir ahora me vienen de maravilla para cual meteoro entrar a meta y a pesar de ser un año mas viejo bajar 12 minutos mi tiempo del año pasado, por tanto que mejor regalo de cumpleaños!!!

Estupendo he mejorado el día de mi cumpleaños, mejor imposible.

Con Gustavo, y su esguince que no le permitió disfrutar de la parte final.

Las risicas postcarrera, con la cerveza en la mano, que momentazos.

Como siempre, un perfecto avituallamiento final nos acoge, bocadillos, frutos secos, frutas, turrón de todas clases, camiseta, bolsa de corredor con tres pastillas de turrón, y como no cerveza, mucha cerveza fresquita para premiar el esfuerzo. Van llegando poco a poco todos los villeneros, todos a nuestra manera hemos pasado un día espléndido y con eso nos quedamos disfrutar haciendo lo que nos gusta. Xixona, hasta el año que viene!!!